Como elegir el mejor champú para el pelo graso

No hay nada malo en lavarse el pelo todos los días, pero verás que hacerlo dos o tres veces por semana es mucho más agradable y ahorra mucho tiempo. Si tienes el pelo graso, el simple hecho de crear un sistema de aseo adecuado te ahorrará un perpetuo lavado de cabeza.

Primer paso, elegir un buen champú para el pelo grasoso

Es normal que sientas la tentación de lavarlo muchas veces para que no se engrase y secarlo para quitar el efecto de humedad. Este es el primer error que debes evitar.

Si el champú es demasiado agresivo, secará en exceso el cuero cabelludo y hará que este redoble sus esfuerzos para reparar la película protectora. Por ello, hay que elegir la fórmula base más suave posible (los SLS y los sulfatos son muy fuertes, los derivados del coco son suaves).

Lo más probable es que estos champús no sean muy espumosos, y suelen tener una textura bastante líquida, por lo que hay que acostumbrarse a ellos, ya que limpian tan bien como sus homólogos espumosos. Solo que el pelo mojado se sentirá más suave y resbaladizo con la punta de los dedos. No es una limpieza que rechine y en el contexto de la piel grasa, eso es algo bueno.

Otro punto importante es la longitud del cabello, porque un cuero cabelludo graso no excluye necesariamente unas puntas deshidratadas y quebradizas. También en este caso, las condiciones iniciales de la tarea restringen ligeramente la elección de los ingredientes hidratantes: es mejor evitar los aceites nutritivos en las formulaciones que serán demasiado pesadas para la piel.

Una alternativa más segura es la glicerina, la vitamina B6, los extractos de manzanilla, el lúpulo, los aminoácidos y el pantenol calmante. Por otro lado, los aceites esenciales (menta, limón, romero, tomillo) serán útiles. Tienen un suave efecto astringente y regulan las glándulas sebáceas.

Las siliconas y los aceites minerales deberían estar en la lista negra. Déjalo para las dueñas del cabello seco o rizado. La arcilla es un ingrediente controvertido, en teoría es buena y hace un gran trabajo con la grasa, pero aun así es mejor usar un producto especial con ella de forma ocasional (una vez cada 7-10 días), ya que puede resecar la piel si se usa de forma habitual.

Importancia del PH en el champú para cabello graso

Lo interesante de elegir un champú es su equilibrio de pH. La química de la escuela nos dice que necesitamos una fórmula alcalina para romper y lavar rápidamente las moléculas de grasa, así es como funciona cualquier jabón.

El agua de la tubería de casa tiene un pH de aproximadamente 7, y es bastante fuerte para el propio cabello, el pH del cuero cabelludo oscila entre un 5,5 ligeramente ácido en uno sano y un 7 o más si los hongos y las bacterias hacen estragos allí.

Si en el envase pone "detox" o "limpieza profunda", se trata de un champú alcalino: esta fórmula abre rápidamente la cutícula para eliminar el sebo y los residuos de los productos de peluquería. Una investigación realizada por científicos brasileños ha demostrado que la mayoría de los champús anticaspa están inclinados hacia arriba dado el equilibrio de la piel con caspa, parece incluso fisiológico, pero esa limpieza puede ser bastante agresiva.

Y no hace falta probar el champú con indicaciones especiales para entenderlo. Si notas que su uso regular reseca tu cabello, deberás usarlo de vez en cuando o asegurarte de "enjuagarlo" con algún enjuague no ácido.

O no utilizarlo en absoluto y buscar una alternativa: Los champús con pH alto son muy agresivos. Su uso se justifica solo en algunos procedimientos de salón con protocolos y secuencias de medios probados.

En algunas marcas y líneas de cuidado para el cabello, los fabricantes siguen tratando de mantener el equilibrio en un nivel bajo de acidez de 5,5 y lograr una buena limpieza profunda con los activos adicionales.

En las gamas de cabellos grasos, suele ser el piritionato de zinc, que tiene un efecto seborregulador, limpia el cuero cabelludo y ayuda a eliminar la caspa que suele acompañar a este tipo de cabellos.